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Tal vez esté aburrido o procrastinando con la montaña de trabajo aburrido de papeleo que tiene que hacer, pero Frenchie ha estado notando un nuevo hábito que Butcher ha adoptado.
A las 11 en punto cada mañana, el hombre robusto se levantará de su escritorio, tomará su abrigo y saldrá del edificio de la FBSA. Luego, unos 30 a 45 minutos después, regresará con una taza de café. A Frenchie le tomó un tiempo darse cuenta de que esto era algo que Butcher estaba haciendo.
Cuando realmente empezó a darse cuenta, le pareció muy extraño cuánto tiempo se ausentaba Butcher. Había una cafetería perfectamente buena a 5 minutos, pero no le dio mucha importancia. Quizás Butcher tenía gustos específicos, no sería la primera vez que el hombre hacía cosas que realmente no entendía.
Una vez cometió el error de pedir su propia taza cuando Butcher se iba. Por esta solicitud, Frenchie recibió una mirada incrédula, como si estuviera hablando en jeroglíficos egipcios.
Recibió un no agresivo, no en palabras, sino un juramento que Butcher adora usar. El británico se marcha dando un portazo y, una vez más, aparece con una taza de café. Frenchie sube más tarde para preguntar por qué se negó a traerle algo si estaba fuera a comprar café.
"No soy tu sirvienta, amigo." es lo que le dice. Antes de que Frenchie tenga la oportunidad de discutir, Butcher se levanta y "sale a fumar", como dice.
Ahora, Frenchie conoce a Butcher desde hace varios años y no es tonto. Es alguien que fue criado en un hogar difícil, obligado a aprender los hábitos, tics y gestos sutiles que salvan vidas.
Está usando ese conocimiento ahora mismo, y le está diciendo que Butcher está escondiendo algo. Quizás sea el ligero movimiento de sus labios cuando Frenchie menciona el café en su mano cada vez que regresa, y la naturaleza agresiva cuando alguien comenta al respecto.
Claro, Butcher era una persona enojada y distante por defecto, pero su enojo en esta ocasión era más miedo. Definitivamente había algo raro.
Les explicó lo que sentía a M.M. y Kimiko, pero no estaban realmente de su lado. No es que no estuvieran de acuerdo con él, simplemente no les importaba lo suficiente como para querer investigar esto más a fondo.
Frenchie estaba decidido a llevar esto hasta el final, si solo fuera para vengarse de Butcher por ignorar su solicitud de café hace tantos días. ¿Increíblemente mezquino? Tal vez. ¿Satisfactorio? Absolutamente.
Así que, el próximo lunes después del fin de semana, como era de esperar, Butcher se levanta de su silla exactamente a las 11:00 am y sale por la puerta como si no hubiera estado en la oficina en primer lugar. Contando los segundos hasta llegar a 20, Frenchie está detrás de Butcher, pisándole los talones.
Frenchie se asegura de seguirlo con cuidado, Butcher está alerta y observador, notará rápidamente si alguien lo está siguiendo. Después de unos 10 minutos de caminar, Butcher entra en un café, estirando el cuello para ver el nombre que dice "Días calurosos" en marrón en un letrero verde.
Frenchie no es lo suficientemente tonto como para entrar, afortunadamente la parte delantera de la tienda es de cristal, echando un vistazo casualmente por dentro. Butcher pide algo, presumiblemente en el mostrador, y se va a sentar en la parte trasera, con la amplia espalda del Butcher como única vista para el francés.
Es frustrante no poder ver la expresión de Butcher, pero no puede arriesgarse a ser visto al entrar, así que tendrá que conformarse con verlo de espaldas.
Pronto, alguien pasa por el puesto de Butcher y se sienta frente a él. Ahora, Frenchie puede ver la cara de ese hombre. Es alto, con rizos castaños y una ligera barba. Es difícil de decir cuando está sentado, pero parece tan alto como Butcher. Definitivamente más alto que él, al menos. Lo más desconcertante era que su sonrisa era grande, todo eso para Butcher sentado frente a él.
Frenchie no cree haber visto a alguien sonreírle a Butcher, y con razón. Es amargado con casi todo el mundo.
La pareja simplemente se queda allí, charlando y parece que va bastante bien. Frenchie realmente desearía poder ver la cara de Butcher porque el misterioso hombre de cabello rizado se está riendo a carcajadas allí dentro. La conversación en ese café no dura mucho más antes de que el amigo de Butcher se levante para irse.
Antes de irse, Butcher extiende la mano y la agarra, quedándose ahí por un segundo, ambos congelados. Frenchie está fijado en la interacción, incluso desde afuera hay una tensión que puede sentir. Se rompe como cristal cuando Butcher se levanta de su asiento y besa al extraño en la mejilla. Una sonrisa se hace aún más grande en el rostro del extraño y se va, abriendo de golpe la puerta del café.
Frenchie considera seguirlo, pero decide que es mejor no presionar. Dando una última mirada furtiva, Butcher está mirando la puerta por la que acaba de salir, con una expresión nostálgica y cálida en su rostro.
El afecto en su rostro de alguna manera se transmite al suyo. Tal vez sea un romántico de corazón, pero no puede evitar apreciar que alguien encuentre el amor.
Dicho esto, aún no es suficiente para evitar que filtre esto al equipo cuando regrese.
Oh, se va a divertir mucho burlándose y provocando a Butcher con esto. Nunca vuelvas a joder con el pedido de café de Sergei.